Reportes ESG: qué son, por qué son importantes y elaborarlos bien
Volver a la página de GlosarioMás del 90 % de las grandes empresas publican ahora informes ESG. Esa cifra sigue creciendo a medida que gobiernos, inversores y socios comerciales exigen una mayor visibilidad sobre cómo las empresas gestionan las cuestiones medioambientales, sociales y de gobernanza.
Lo que comenzó como una iniciativa voluntaria se ha convertido en un requisito en numerosas regiones. Los reglamentos de la UE, el Reino Unido, EE. UU. y otros mercados ahora exigen la divulgación de reportes ESG a miles de empresas. Al mismo tiempo, inversores y clientes demandan datos ESG claros y coherentes a la hora de tomar decisiones.
¿Qué son los reportes ESG?
Los reportes ESG, que también se conocen como información no financiera o extrafinanciera, consiste en divulgar el desempeño de su empresa en los temas medioambiental, social y de gobernanza. Esta información brinda a autoridades, inversores, clientes y otras partes interesadas una visión clara de cómo una empresa gestiona los riesgos, cumple las normas y avanza en cuestiones no financieras. A diferencia de la información financiera, los reportes ESG abarca el impacto de su empresa en el medio ambiente y la sociedad, y cómo esos factores podrían afectar a los resultados de su negocio.
Temas principales que abordan los informes ESG
La mayoría de los informes ESG incluyen una combinación de datos y descripciones sobre áreas temáticas clave. Entre los temas más comunes se incluyen:
- Medioambientales: emisiones de carbono (alcance 1, 2 y, en ocasiones, 3), consumo y origen de la energía, consumo de agua, contaminación, gestión de residuos y riesgos climáticos y esfuerzos de adaptación.
- Sociales: Prácticas laborales y derechos humanos; diversidad, igualdad e inclusión, desempeño en materia de salud y seguridad en el trabajo, y condiciones laborales en la cadena de suministro.
- Gobernanza: Políticas de ética y anticorrupción, estructura y supervisión del consejo de administración, remuneración de los ejecutivos y mecanismos de reclamación y denuncia.
Estos temas suelen estar vinculados a políticas internas, objetivos e indicadores de desempeño. El informe explica qué se mide, qué se ha conseguido y en qué se está trabajando.
Formatos y canales de reportes habituales
No existe un formato único para la divulgación de reportes ESG. La forma de informar dependerá de los requisitos normativos, las expectativas de los clientes y la capacidad interna. Los formatos más habituales son:
- Informes de sostenibilidad o ESG anuales publicados en su sitio web
- Divulgación de reportes ESG integrada en su informe anual principal (memoria integrada)
- Presentación de documentos a plataformas o registros externos, como por ejemplo:
- CDP (para datos sobre el clima y el agua)
- Portales públicos (p. ej., registros de cumplimiento de la UE o del Reino Unido)
- Plataformas de reportes bursátiles
Muchas empresas estructuran sus reportes utilizando marcos establecidos. Estos marcos definen qué se debe informar y cómo se debe calcular, lo que ayuda a que su informe sea más coherente y comparable.
De los reportes voluntarios a los obligatorios
A principios de la década de 2000, los reportes ESG eran voluntarios. Las empresas publicaban informes de responsabilidad social empresarial (RSE) como gesto de buena voluntad o para responder a la presión de sus partes interesadas. No existían normas comunes y los reportes variaban enormemente. La GRI ofreció una estructura inicial, pero su adopción era opcional.
En la década de 2010, los inversores y las agencias de calificación comenzaron a presionar para que los datos ESG fueran más coherentes. Las calificaciones e índices ESG, como el MSCI y el Dow Jones Sustainability Index, hicieron más visible el desempeño ESG. Surgieron marcos como SASB y TCFD para satisfacer la demanda de los inversores de datos útiles para la toma de decisiones vinculados al desempeño financiero.
A partir de finales de la década de 2010, los gobiernos comenzaron a introducir normas de divulgación obligatoria de Reportes ESG. Entre los hitos más importantes cabe destacar los siguientes:
- 2017-2021: Países como el Reino Unido, Japón y la UE comenzaron a exigir reportes climáticos conformes con el TCFD.
- 2021-2022: La UE propuso y adoptó la directiva de la UE sobre presentación de información sobre sostenibilidad por parte de las empresas (CSRD), que introduce la obligación de presentar reportes ESG.
- 2022: Se creó el ISSB para unificar las normas ESG a nivel mundial.
- 2023-2024: La norma climática de la SEC avanzó en Estados Unidos (pero desde entonces ha quedado en suspenso). Otros países, como Canadá y Australia, están avanzando en la misma dirección.
Aunque existe una clara tendencia hacia la convergencia, con marcos como el TCFD y el ISSB que influyen en las normas internacionales, persisten las diferencias regionales. Estas diferencias son especialmente notables entre las normativas de la UE y EE. UU., sobre todo en lo que se refiere al alcance, las definiciones de materialidad y los requisitos de verificación independiente.
Reportes voluntarios frente a obligatorios
Como hemos comentado, los reportes ESG tuvieron inicialmente un carácter voluntario. Las empresas publicaban informes de sostenibilidad para mostrar sus avances, atraer inversores o responder a la presión de las partes interesadas. Esto está cambiando.
Actualmente, numerosos territorios exigen la divulgación obligatoria de reportes ESG. Algunos ejemplos:
- Directiva de presentación de información sobre sostenibilidad por parte de las empresas (CSRD): Aplicable a las grandes empresas de la UE y a algunas empresas fuera de la UE, pero que operan en la Unión, exige la divulgación detallada de reportes ESG en consonancia con las Normas Europeas de Información sobre Sostenibilidad (NEIS).
- Leyes SB 253 y SB 261 de California: Exigen a las grandes empresas que operan en California que informen sobre sus emisiones y los riesgos financieros relacionados con el clima.
Incluso cuando no son obligatorios, se espera que las empresas presenten reportes ESG: los inversores suelen solicitar métricas ESG antes de tomar decisiones, los grandes clientes piden a sus proveedores que compartan datos ESG, y los bancos y las aseguradoras pueden utilizar evaluaciones de riesgo ESG para fijar sus precios.
De cara al futuro, se espera que los requisitos en materia de reportes ESG sigan ampliándose. Las próximas leyes de diligencia debida de la UE introducirán la información sobre la cadena de suministro. Es probable que otros países sigan su ejemplo con mandatos más amplios que abarquen temas sociales y de gobernanza. Lo que comenzó como una práctica voluntaria se ha convertido en un elemento central del cumplimiento normativo y la estrategia corporativa a largo plazo.
Por tanto, aunque los reportes ESG no sean obligatorios por ley en todos los mercados, es probable que los necesite de todos modos para satisfacer las expectativas de sus partes interesadas. Las empresas que operan a nivel internacional deben considerar los reportes ESG como un requisito más para hacer negocios, no como una exigencia extraordinaria.
¿A quién se aplican los reportes ESG?
Los reportes ESG atañían inicialmente a las grandes empresas cotizadas, como las de la lista Fortune 500 o el FTSE 100. Frente a estas empresas, inversores autoridades y agencias de calificación ESG ejercieron presión para exigir una mayor transparencia sobre cómo gestionaban los riesgos de sostenibilidad. Actualmente, esa expectativa se está convirtiendo en un requisito legal en numerosos territorios. Por ejemplo:
- En la UE, la directiva de presentación de información sobre sostenibilidad por parte de las empresas (CSRD) se aplica tanto a las empresas cotizadas como a las grandes empresas no cotizadas.
- En Estados Unidos, la mayoría de las empresas del S&P 500 ya publican reportes ESG, y las normas de la SEC y la legislación de algunos estados, como las leyes SB 253 y SB 261 de California, obligan a informar sobre cuestiones relacionadas con el clima.
Esto se aplica cada vez más a las cadenas de suministro mundiales. Los grandes compradores suelen pedir a sus proveedores que compartan datos ESG en el marco de los procesos de compras o de los controles de cumplimiento. Así, las empresas medianas pueden tener que informar sobre métricas ESG a sus clientes clave, incluso sin que exista una obligación legal. Los códigos de conducta de los proveedores y los cuestionarios ESG son ahora elementos habituales en las relaciones comerciales con multinacionales, por lo que está claro que las expectativas en materia de reportes ESG están dejando de ser algo que solo las grandes empresas deben tener en cuenta.
El sector también es importante. Algunos sectores, como los de servicios financieros, petróleo y gas, manufactura, industria pesada y bienes de consumo, se enfrentan naturalmente a un mayor escrutinio que otros debido al tamaño o la naturaleza de su impacto medioambiental y social. Si su empresa opera en alguno de estos sectores, es más probable que se enfrente a la obligación de presentar reportes ESG o a unas expectativas más estrictas de sus partes interesadas.
Nuevas leyes que cambian los requisitos en materia de reportes ESG
Varios cambios legislativos recientes muestran la amplitud que está adquiriendo el alcance de los reportes ESG. La CSRD de la UE afectará a numerosas empresas extranjeras que generan un volumen de negocios considerable dentro de la UE. La SB 253 de California exigirá a las empresas con ingresos anuales superiores a mil millones de dólares y que operen en California que informen sobre sus emisiones de gases de efecto invernadero.
Incluso las empresas más pequeñas están sintiendo el impacto. Aunque no estén directamente sujetas a las leyes ESG, muchas informan de forma voluntaria. A menudo, esto se ve favorecido por las expectativas de los inversores, las demandas de los clientes o las actividades de preparación para normativas que podrían aplicarse en el futuro. Los reportes ESG afectan ahora a empresas de todos los tamaños, directa o indirectamente, especialmente a las que operan en los principales mercados.
Cómo funciona los reportes ESG: proceso de elaboración de reportes
Los reportes ESG siguen un ciclo estructurado. Comienzan con la recopilación de los datos adecuados, a lo que sigue la priorización y la selección de la norma aplicable y, por último, la publicación del informe. Cada etapa contribuye a presentar una información clara y útil que satisfaga las crecientes expectativas de las partes interesadas y los requisitos normativos.
Recopilación de datos ESG
El proceso comienza con la recopilación de datos ESG a todos los niveles de la empresa. Esto incluye datos medioambientales de las operaciones, datos sociales de los equipos de RR. HH. y de personal, así datos de gobernanza de las funciones jurídicas o de cumplimiento normativo. Dado que las cuestiones ESG afectan a diferentes departamentos, la colaboración es esencial.
- Los datos medioambientales pueden incluir consumo de energía, emisiones de gases de efecto invernadero, volúmenes de residuos y consumo de agua.
- Los datos sociales pueden proceder de los sistemas de RR. HH. que realizan un seguimiento de la demografía de la plantilla, los incidentes de seguridad y las horas de formación.
- La información sobre gobernanza suele incluir la estructura del consejo de administración, las políticas de ética y las métricas de cumplimiento normativo.
El seguimiento manual sigue siendo habitual en las primeras fases de la elaboración de reportes, si bien numerosas empresas emplean plataformas de software ESG para centralizar los datos, mejorar la precisión y reducir la carga de trabajo que exige la elaboración de reportes a lo largo del tiempo.
Evaluación de materialidad
Una evaluación de materialidad ayuda a decidir qué temas deben incluirse en el informe. Identifica qué cuestiones ESG son más importantes en función de su pertinencia para su negocio y su importancia para las partes interesadas.
Una empresa de logística podría priorizar las emisiones de carbono y a las condiciones laborales en la cadena de suministro, mientras que una empresa de software podría centrarse más en la privacidad de los datos y el bienestar de los empleados. La clave es centrar la información en las cuestiones asociadas con el riesgo, las oportunidades y los resultados.
Algunas normativas exigen ahora la «doble materialidad», que tiene en cuenta cómo los factores ESG afectan al negocio y cómo el negocio afecta a la sociedad o al medio ambiente.
Elegir un marco para la elaboración de reportes
Una vez que se sabe de qué informar, el siguiente paso es decidir cómo. Los marcos de reportes ESG brindan orientación sobre qué indicadores incluir, cómo calcularlos y cómo presentar los resultados.
La mayoría de las empresas utilizan uno o varios de los siguientes:
- GRI para la divulgación de información sobre sostenibilidad centrada en las partes interesadas en general
- SASB para la información sectorial específica y centrada en los inversores
- TCFD para el riesgo climático y la gobernanza
- CSRD-NEIS para la información obligatoria en la UE
- Normas ISSB para la armonización global y el uso por parte de los inversores
Elegir un marco desde el principio ayuda a formular la estructura y la metodología de su informe y mejora la coherencia para sus destinatarios.
Preparación y verificación del informe
Después de recopilar los datos y elegir el marco, se comienza a elaborar el informe. Por lo general, incluye una combinación de:
- Contexto: Su estrategia, objetivos y políticas ESG
- Métricas: Datos de desempeño para cada tema clave
- Comentarios: Explicaciones sobre los avances, los contratiempos y los planes
La mayoría de los informes incluyen elementos visuales, como gráficos o comparaciones interanuales. Algunos también incluyen breves casos prácticos para ilustrar los programas en marcha. El objetivo es proporcionar información clara, útil para la toma de decisiones y respaldada por pruebas.
A medida que los reportes ESG se regula más, la verificación externa se está convirtiendo en algo habitual. Esto significa que un tercero revisa los datos ESG seleccionados para confirmar que son precisos y trazables. En la UE, la CSRD exige una verificación limitada para los datos ESG comunicados. Otras regiones podrían establecer requisitos similares. Esta verificación mejora la fiabilidad de su informe y brinda a las partes interesadas más confianza en la información que usted les proporciona.
Publicación, divulgación y mejora continua
Una vez elaborado, el informe ESG se publica. La mayoría de las empresas:
- Lo publican en su sitio web corporativo
- Incluyen secciones ESG en sus informes financieros anuales
- Envían datos seleccionados a plataformas como CDP o portales públicos.
Los plazos de presentación de reportes suelen seguir el calendario financiero, y los informes completos se publican anualmente. En algunos casos, las empresas también proporcionan actualizaciones trimestrales sobre los indicadores ESG clave.
La presentación de reportes ESG no es un ejercicio puntual. Cada ciclo aporta nuevos conocimientos sobre el desempeño de una empresa y los aspectos que se pueden mejorar. Puede ampliar su alcance con el tiempo realizando un seguimiento de más proveedores, añadiendo nuevas métricas ESG o adaptándose a nuevos marcos. La calidad de los datos suele mejorar con cada ciclo y la presentación de reportes se integra cada vez más en la planificación empresarial.
Principales marcos y normas de presentación de reportes ESG
Una vez que sabe sobre qué temas ESG debe informar, el siguiente paso es elegir cómo estructurar esos reportes. Ahí es donde entran en juego los marcos y las normas. Estos le indican qué métricas debe incluir, cómo calcularlas y cómo comunicar sus datos de forma que resulten útiles para otros actores, ya sean inversores, autoridades o clientes.
Algunos marcos están diseñados para uso general, otros son específicos de un sector, se dirigen a los inversores o se exigen por ley. Cada vez más, estos marcos se armonizan o combinan para reducir la complejidad que supone para las empresas ofrecer estos reportes en múltiples mercados.
Existen dos tipos de marcos de reportes ESG:
- Los marcos internacionales voluntarios, como la GRI, el SASB y el TCFD, ampliamente adoptados en todos los sectores y geografías.
- Los marcos nacionales o regionales obligatorios, como la CSRD de la UE, que se transpone en la legislación nacional.
Muchos marcos voluntarios han conformado o influido directamente en las normas obligatorias. Por ejemplo, las NEIS de la UE se basan en los conceptos de la GRI y el TCFD. Las normas del ISSB consolidan el SASB y el TCFD bajo un mismo paraguas, con el objetivo de servir de referencia internacional que las autoridades pueden adoptar o desarrollar.
GRI: reportes amplios y centrados en las partes interesadas
La Global Reporting Initiative (GRI) ofrece un conjunto de normas para las empresas que desean comunicar su impacto en materia de sostenibilidad de forma clara y coherente. La GRI es uno de los marcos ESG más consolidados y utilizados.
Se ha diseñado para una amplia gama de partes interesadas y apoya un enfoque de doble materialidad. Esto significa que se informa tanto sobre cómo las cuestiones ESG afectan a su negocio como el modo en que su negocio afecta al medio ambiente y a la sociedad. La GRI cubre todo el espectro ESG, desde las emisiones y el uso de la energía hasta las prácticas laborales y los derechos humanos. A menudo se utiliza como base para los informes de sostenibilidad de carácter general.
SASB: específico para cada sector y con relevancia financiera
El Sustainability Accounting Standards Board (SASB) proporciona normas de información para 77 sectores diferentes, cada uno con su propio conjunto de criterias ESG más susceptibles de tener relevancia financiera. Este marco está dirigido a los inversores y los mercados de capitales.
Las normas SASB ayudan a las empresas a identificar qué métricas ESG son más importantes para su sector y cómo comunicarlas de manera que se vinculen directamente con los resultados financieros. A menudo se utiliza junto con marcos más amplios, como el de la GRI, para ofrecer a las partes interesadas una visión más clara de los factores de riesgo y valor. El SASB forma ahora parte de la Fundación de las Normas Internacionales de Información Financiera (IFRS Foundation) y se ha incorporado a las normas del ISSB.
CSRD y NEIS: reportes obligatorios en la UE
La directiva de presentación de información sobre sostenibilidad por parte de las empresas (CSRD) de la UE es un marco de reportes obligatorio que también se aplica a las empresas fuera de la UE que operan en Europa y superan un determinado umbral de ingresos.
La CSRD exige a las empresas que informen de acuerdo con las Normas Europeas de Información sobre Sostenibilidad (NEIS), que son detalladas, prescriptivas y están sujetas a una evaluación de doble materialidad. Estas normas van más allá del clima e incluyen las prácticas de la cadena de suministro, la gobernanza, los datos sobre la plantilla y la diligencia debida en materia de derechos humanos.
Los informes elaborados en virtud de la CSRD deben etiquetarse digitalmente, presentarse a las autoridades y verificarse por terceros. El cumplimiento comienza con los datos del ejercicio fiscal 2024 para las grandes empresas de la UE y se ampliará a partir de entonces. (La denominada propuesta ómnibus de suspensión temporal entró en vigor, retrasando formalmente la aplicación de la CSRD un plazo de dos años para las empresas incluidas en la segunda y tercera fase).
TCFD: marco de divulgación de riesgos climáticos
El Grupo de Trabajo sobre Divulgación de Información Financiera relacionada con el Clima (TCFD) proporciona una estructura para que las empresas informen sobre los riesgos y oportunidades relacionados con el clima. Agrupa la información divulgada en cuatro áreas clave: gobernanza, estrategia, gestión de riesgos y métricas y objetivos.
Aunque el marco del TCFD es voluntario, ha sido adoptado como requisito legal en varios países y ha influido considerablemente en el desarrollo de otros marcos, como el del ISSB y algunos elementos de las NEIS de la UE. El marco del TCFD se centra en el aspecto medioambiental de los criterios ESG, concretamente en el clima. Las empresas suelen utilizarlo para estructurar la sección sobre clima de sus reportes ESG generales.
ISSB: normas básicas con vocación internacional
El Consejo Internacional de Normas de Sostenibilidad (ISSB) se creó para armonizar los reportes ESG en todos los territorios. Sus dos primeras normas, NIIF S1 y NIIF S2, se publicaron en 2023:
- La NIIF S1 es una norma general para presentar reportes sobre todos los riesgos y oportunidades relacionados con la sostenibilidad que podrían afectar al valor de una empresa.
- La NIIF S2 se centra específicamente en la divulgación de información climática e incorpora la estructura del TCFD.
Las normas del ISSB tienen por objeto complementar los reportes financieros y están diseñadas para satisfacer las necesidades de los inversores. Varios países y bolsas de valores ya están contemplando la adopción de estas normas en el marco de sus normas oficiales.
Resumen y diferencias clave
Norma | Alcance | Voluntaria/obligatoria | Uso principal |
GRI | Criterios ESG en sentido amplio, orientada a las partes interesadas | Voluntario | Divulgación general de información sobre sostenibilidad |
SASB | Específica para cada sector, materialidad financiera | Voluntaria; parte del marco del ISSB | Reportes centrados en los inversores |
CSRD/NEIS | Criterios ESG completos, doble materialidad | Obligatoria para las empresas incluidas en su alcance | Cumplimiento de la normativa |
TCFD | Gobernanza del riesgo climático | Obligatoria en algunas regiones | Reportes sobre riesgos específicos del clima |
ISSB | Sostenibilidad (S1) y clima (S2) | Base voluntaria | Armoniza requisitos normativos y de inversores |
Los reportes ESG en la práctica: gestión de riesgos, diligencia debida y desempeño
Los reportes ESG no solo sirven para informar a las partes interesadas externas, sino que también respaldan funciones internas fundamentales, como la gestión de riesgos, el cumplimiento normativo y el desempeño operativo. Las métricas que se comunican pueden influir directamente en la forma en que su empresa identifica los problemas, establece prioridades y mejora con el tiempo.
Los reportes con datos ESG ayudan a integrar la sostenibilidad en el proceso de gestión de riesgos de su empresa. Cuando los indicadores ESG se supervisan de forma coherente, los riesgos se hacen más visibles y fáciles de gestionar. Por ejemplo, si los informes muestran un aumento de las emisiones o un elevado consumo de agua en regiones propensas a la sequía, esa información debe tenerse en cuenta en la planificación operativa y la mitigación de riesgos. Del mismo modo, los fallos reiterados identificados en las auditorías de los proveedores o las bajas tasas de finalización de la formación en materia de ética pueden señalar riesgos sociales o de gobernanza antes de que se agraven.
Las normativas exigen cada vez más a las empresas que demuestren la diligencia debida en cuestiones medioambientales y de derechos humanos. Los reportes ESG crean una estructura para documentar esos esfuerzos. Los informes suelen incluir detalles sobre las auditorías de los proveedores, los mecanismos de reclamación, las acciones correctivas y los programas de formación. En el caso de leyes como la Ley de la Cadena de Suministro de Alemania o la directiva sobre diligencia debida de las empresas en materia de sostenibilidad de la UE, este tipo de reportes pueden servir como prueba de cumplimiento y ayudar a reducir la exposición legal y reputacional.
A nivel interno, el hecho de elaborar reportes impulsa un mejor desempeño. Cuando se publican métricas ESG, es más probable que la dirección establezca objetivos claros y supervise los progresos. Si se realiza un seguimiento anual de los incidentes de seguridad o los índices de diversidad, los equipos están más motivados para abordar las deficiencias. La presentación de reportes introduce disciplina en la gestión de las cuestiones ESG, al igual que los KPI financieros lo hacen con el desempeño comercial.
Un mejor desempeño ESG suele ir acompañado de mejores resultados financieros. Un menor consumo de energía reduce los costes. La gestión de las cuestiones laborales reduce las interrupciones y la rotación de personal. Una gobernanza transparente reduce el riesgo de fraude o de sanciones normativas. Todo ello contribuye a una mayor estabilidad de las operaciones y a un valor más sólido a largo plazo.
Numerosas empresas integran ahora las métricas ESG en su estrategia empresarial, incluida la responsabilidad de los directivos. No es raro que los objetivos ESG estén vinculados a la remuneración de los directivos, lo que indica que la sostenibilidad es una prioridad empresarial y no un proyecto secundario.
¿Se anima a mejorar sus informes?
EcoVadis ayuda a las empresas a utilizar sus datos ESG para elaborar reportes claros y prácticos, ya sea para responder a los requisitos normativos, satisfacer las expectativas de los inversores o gestionar el riesgo de la cadena de suministro. Nuestras herramientas están diseñadas para apoyar todas las etapas del proceso de presentación de reportes ESG, desde la recopilación de datos hasta el seguimiento de las mejoras.
Póngase en contacto con nosotros para conocer cómo EcoVadis puede ayudarle con sus reportes ESG, desde la recopilación de datos hasta su publicación.